Bombas de agua y equipos de presión hidro-neumáticos.
Para asegurar una correcta presión del equipo de electrobombas, el cual tiene que elevar el agua muchos metros, es necesario un óptimo y constante mantenimiento preventivo para evitar costosas averías, y asegurar una mayor duración de la maquinaria y equipamiento existente. Así mismo, se deben cuidar detalles necesarios para el confort de los usuarios, como una presión de agua constante y equilibrada que favorece el buen funcionamiento del calentador de agua, por ejemplo.
Otra cuestión muy importante es el depósito de agua o aljibe, que necesita cada año una limpieza para eliminar los residuos depositados en el fondo de dichos recipientes, así como la posible entrada de insectos, formación de bio-capas, etc. De la misma forma, al estar el equipo normalmente en una estancia cerrada al público, es necesaria una continua revisión de las tuberías generales del agua, ya que con el tiempo aparecen oxidaciones, fugas de agua, etc, que estropean los equipos y entrañan riesgos de rotura e inundación con lo que eso conlleva, por eso es tan importante una vigilancia de las instalaciones por personal cualificado para evitar desastres.
Puntos que revisamos en cada mantenimiento preventivo:
- Bombas (cojinetes, bobinado, turbinas, bornas, fugas, etc)
- Inyectores (Latiguillos, mecanismo, etc)
- Colector (Oxidación, fugas, etc)
- Vasos de expansión hidro-neumáticos (Presión de trabajo, membrana, etc)
- Depósitos y aljibes (Limpieza y desinfección, fugas, impermeabilización, etc)
- Grifo de llenado (Flotador, zapata de cierre, etc)
- Válvulas (Funcionamiento, fugas, etc)
- Unidades de medida y control (Manómetros, presostatos, etc)
- Automatismos (Interruptores de nivel, contactores, relés, etc)
- Sistema eléctrico (Conexiones, fusibles, señalización, protecciones, etc)
- Tuberías generales (Oxidación, válvulas, fugas, etc)
- Sumidero (Atascos, obstrucciones, etc)
- Limpieza de la sala del grupo de presión (Insectos, suciedad, etc)
La revisión periódica de todos estos puntos por un profesional cualificado, marca la diferencia completamente, y asegura una larga duración de los equipos, ya que son muy caros, y a su vez, supone un ahorro económico significativo, diferenciando claramente, entre un mantenimiento preventivo (donde se evitan las averías costosas) y un mantenimiento correctivo (donde se afrontan averías caras por abandonar el cuidado de las instalaciones), está comprobado.
Además, según el Real Decreto 140/2003, de 7 de febrero, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano, la ley obliga a la limpieza del depósito de agua potable y de los aljibes de almacenamiento, al menos 1 vez al año para prevenir infecciones como la proliferación de la bacteria Legionella. leer más…
¿Qué incluyen los planes de mantenimiento?
- Revisión mensual en la que se realizarían los trabajos propios del mantenimiento preventivo, para asegurar el continuo y perfecto funcionamiento de los equipos.
- Asistencia de los técnicos los 365 días en caso de avería o incidencia, y asistencia telefónica para resolución de dudas con respecto al funcionamiento del sistema.
- La mano de obra de aquellas averías eventuales que conlleven o no sustitución de materiales.
- Materiales y equipos (según contrato).
- Reparación bombas.
- Limpieza del depósito de agua cada año.
Necesita calcular o acceder a información detallada sobre el cálculo y la elección de equipos?
Acceda al siguiente link: GUIA CALCULO BOMBAS DE AGUA Y GRUPOS DE PRESIÓN
MANTENIMIENTO GRUPOS DE PRESIÓN HIDRONEUMÁTICOS:
El adecuado y constante mantenimiento por parte de personal especializado, brinda unos amplios beneficios para los propietarios:
- Asegura el correcto funcionamiento en todo momento
- Proporciona seguridad para los usuarios
- Amplía la duración de las instalaciones
DIFERENTES TIPOS DE EQUIPOS DE PRESIÓN HIDRONEUMÁTICOS
Según la forma de suministrar la presión:
Estándard:
Compuestos por una o más bombas horizontales o verticales, accionado a través de presostato, regulado para su arranque y paro a una determinada presión. Normalmente aspiran el agua de uno o más depósitos, los cuales se llenan con un grifo especial accionado por un flotador. Como medida de seguridad, se coloca un interruptor de nivel, de tipo boya, para proteger las bombas contra trabajo en vacío, por si el depósito quedara vacío por cualquier motivo. Incorporan un cuadro eléctrico con protecciones contra sobrecargas, cortocircuitos y derivaciones. La carga de los motores la soportan unos contactores apoyados por un relé térmico de protección. En ocasiones llevan instalado un mecanismo que alterna el funcionamiento de ambas bombas de manera automática. Este tipo de equipos se pueden encontrar con diferentes configuraciones de control y señalización.
De velocidad variable:
Compuestos por una o más bombas, de las cuales al menos una, se encuentra gobernada por un variador de frecuencia, el cual se encarga de mantener una determinada presión constante, pero con un caudal variable. El resto de bombas se accionan a través de presostato mecánico o de forma electrónica, y sirven de apoyo en un momento puntual que se demande más cantidad de caudal, de manera que van arrancando en forma de cascada. Este tipo de grupo es más frecuente encontrarlo conectado directamente a la red (según C.T.E), sin depósitos de almacenamiento por motivos de espacio, además de que no necesitan grandes acumuladores hidroneumáticos. Aunque resultan algo más caros, tienen la ventaja de consumir menos electricidad y prolongar su vida útil, ya que su funcionamiento progresivo (sistema inverter), evita los bruscos arranques y paros, por consiguiente reduce los golpes de ariete, y elilina los típicos picos de energía eléctrica de los equipos estándar; en definitiva, una opción más que aconsejable por sus grandes ventajas y reducidos costes de mantenimiento. Consúltenos.
Otros elementos que forman la instalación:
- Recipientes acumuladores hidro-neumáticos o vasos de expansión.
Su función consiste en absorver los golpes bruscos que provoca el agua en su movimiento por las tuberías a causa del empuje de las bombas, y por otro lado, suministrar una reserva de presión para disminuir el número de arranques de dichas bombas, por lo tanto son imprescindibles para obtener una presión estable, y proteger el circuíto hidráulico, alargando la vida útil de las instalaciones. Esto se consigue introduciendo una parte de aire y una parte de agua en el recipiente, y ese “colchón de aire a presión” es el que se encarga de hacer el trabajo, por lo tanto hay que asegurar en todo momento que ese aire permanezca dentro, pues se termina perdiendo por varias razones, he ahí la importancia de tener contratado un mantenimiento.
Los encontramos de 2 tipos:
- De acero galvanizado – El aire se le suministra de manera automática con cada arranque de las bombas, ya que se insufla con unos dispositivos automáticos llamados inyectores o insufladores. También se puede realizar a traves de un compresor común, automatizando su funcionamiento. Es necesario un mantenimiento para asegurar que los inyectores están en buen estado, y/o que el compresor dispone de aceite lubricante y no tiene fugas de aire, entre otras comprobaciones.
- De membrana – Incorporan una membrana de goma sintética que separa las dos cámaras (agua/aire), y los hay con membrana recambiable o membrana fija. Cuentan con una válvula de carga, para conectar el compresor de aire e introducir la presión necesaria según los parámetros concretos de cada instalación. Dicha carga de aire hay que reponerla aproximadamente cada 3 meses según el modelo de recipiente, si no lo hacemos la instalación empieza a funcionar de forma deficiente hasta provocar una avería grave. Es necesario un mantenimiento.
MANTENIMIENTO DE BOMBAS SUMERGIBLES Y DE ACHIQUE
Es conveniente el mantenimiento y revisión de las bombas de achique de agua que se encuentran en los garajes, sótanos, fosos de ascensores y pozos. Aunque nadie suele reparar en su existencia, en el caso de achicar agua, es un mecanismo de seguridad contra inundaciones imprescindible, el cual ha de encontrarse en perfectas condiciones de funcionamiento. Así mismo, en caso de suministrar agua de consumo a partir de pozos, el correcto mantenimiento asegura la duración de la bomba, así como un consumo eléctrico moderado.
Por tanto, solo los profesionales cualificados, pueden asegurar que estos equipos cumplen su servicio en óptimas condiciones. La ausencia de un mantenimiento preventivo, puede ocasionar graves daños al equipo, así como inundaciones, con numerosos daños materiales y costosas facturas.
¿Qué incluye el mantenimiento?
- Revisión de las bombas de achique y sumergibles (bomba, válvula anti-retorno, cuadro de maniobra, interruptor de nivel, etc).
- Mano de obra de las labores propias del mantenimiento.
- Limpieza arqueta de bomba (colillas, papeles, etc).
- Carga de aire del recipiente hidroneumático.
- Reparación bombas.
- En caso de avería o incidencias, asistencia los 365 días, en horario laboral, incluso festivos.
Gracias al mantenimiento especializado, podrá disfrutar de unas instalaciones en perfecto funcionamiento, que garantizará la tranquilidad y el confort de los usuarios.